Todo se prestaba para que el piloto local se condecorara enfrente de todos sus admiradores, o eso al menos es lo que pretendía el gran Carlos Reutemann. Habían pasado 6 años de una gran desilusión, donde su Brabham BT44 emblemático se quedó sin nafta faltando una vuelta, donde el entonces presidente Juan Domingo Perón asistió en persona para ver al Lole triunfar.

1980 era un año que encontramos a nuestro piloto con una gran trayectoria y nivel. ¿Que podemos decir de este deportista de élite? Un pequeño resumen:

Corrió en escuderias como Brabham, Lotus, Ferrari y Williams.

12 triunfos, 45 podios en 146 carreras.

Solo le quedaba vencer ante su público entrando a sus 38 años de edad. Tuvo su gran largada que pronto lo ubicó 6º, y en un par de vueltas adicionales rebasó a Pironi y Andretti, quedando detrás de Nelson Piquet.

En el giro 10, sus ruedas se fueron del asfalto y se llenaron de pasto sus radiadores. Algo no andaba bien. Reutemann entra en boxes para limpiar sus pontones y vuelve a la carrera rápidamente. En la ronda siguiente, el impulsor se rompe, junto con los sueños del Lole.

Reutemann sale de su auto y se sienta junto a la rueda trasera del Williams. Otra vez se le esfuma el Gran Premio de Argentina. Todas las criticas de ser acusado de frio, que le faltaba personalidad, carisma y apatía, se esfumaron al verlo llorado desconsolado al lado de su maquina por 15 minutos. Crónica de una desilusión y la bronca de no poder consagrarse frente a su gente.

Este modelo icónico es el que ofrecemos en Maxifun Hobbies: El Williams FW07 en escala 1/43 junto a la figura de un Reutemann que quedará en la memoria de todos. Avisanos o date una vuelta por nuestro local para reservar este diorama de colección. Cantidades muy limitadas. Disponibles en marzo.

Una realización del modelista Pablo Leonardi para Maxifun Hobbies.